martes, 7 de octubre de 2014


Teatro y Drama Cristiano


Obra: Un Ladrón en Navidad


La familia Parker se dispone a asistir a celebrar la Navidad en la iglesia del pueblo cuando se percatan de que les han robado todo el alimento que habían dispuesto para cenar en Nochebuena. La desilusión aumenta cuando su camioneta no funciona y no podrán salir de su granja para llegar al pueblo.

 Los conflictos familiares salen a relucir en medio de la frustración en la humilde vivienda cubierta de nieve. Las discusiones suben de tono destacando la personalidad agresiva del padre de familia.

 En medio de su desesperación para llegar al pueblo no se dan cuenta que en el centro de la sala en donde está un viejo baúl, se esconde el pequeño ratero que no logró escapar a tiempo de la vivienda. Juanito, un huérfano de la localidad es el intruso que se ha robado la comida y la esconde con él esperando la oportunidad para huir. De pronto llega una visita inesperada que hará reflexionar a la familia y al pequeño ladrón sobre el verdadero sentido de la Navidad en sus vidas.

 Toda la obra está llena de humor y suspenso que mantiene al público interesado en la historia.

Personajes

Juanito-Niño ladrón.
Andrew- el Papá, un tipo violento.
Elaine- La Mamá, una esposa sumisa.
Abuela Madelaine- Madre de Andrew.
Melanie-Niña, hija de Elaine y Andrew
Peter- Niño, hijo de Andrew y Elaine.
Dorothy- joven hija de Andrew y Elaine.
Michael-Novio de Dorothy.
Cindy- Amiga de Melanie.
María- Mujer a punto de dar a luz.
Joe- Esposo de María.

Fragmento

Del baúl se asoma Juanito, se aproxima a la ventana con el costal de comida.

Juanito- (Platicando con el público) ¡Oh no! creo que me siento mal, yo no quería hacer esto, pero tenía hambre, soy huérfano y llevo días sin comer, mi pequeña hermana tampoco ha probado nada, con este frío no puedo conseguir un trabajo, todo mundo está en su casa protegiéndose. Pobres personas, los he dejado sin alimento, ojala que puedan conseguir algo. Esperaré un poco a que se vayan para irme a mi choza.

En el exterior se escucha el intento de encender un motor de camioneta pero nunca arranca.
Juanito regresa corriendo al baúl después de asomarse por la ventana. Entra Andrew furioso.

Andrew-  ¡Esto me revienta, me enferma! ¡Elaine ven pronto! ¿Cómo se te pudo olvidar recordarme que debía poner anticongelante a la camioneta para que no se congelara el radiador?

Elaine- Si mal no recuerdo, te lo he dicho durante todo el otoño, pero me dijiste que estaba loca, que faltaba mucho para que cayera una helada.

Andrew- ¿Y me lo dijiste anoche? debiste decírmelo anoche, ¿ahora cómo iremos al pueblo?

Elaine- ¿Anoche? anoche me dijiste que no te dirigiera la palabra porque estabas muuuuy fastidiado.

Andrew- ¡Baah! pretextos.

Abuela- Bueno, hijo, no es para tanto. Total, no vamos al templo y ya, no creo que Dios se enfade.

Andrew- ¿Cómo que no es para tanto? Todos se van a dar cuenta que no fuimos y van a pensar que soy de lo peor.

Melanie- Podemos celebrar un culto familiar aquí en la casa como en casa de Cindy Gordon y luego...

Peter- ¡De ninguna manera! no vamos a hacer ninguna de las prácticas herejes que hacen esos Gordon, iremos al templo como debe de ser, dame el agua caliente Elaine, trataré de descongelar el radiador.

Elaine- Aquí hay una cubeta en la chimenea, toma.

Andrew- ¡Ay, me quemaste! ¿no te fijas en lo que haces?, vamos Peter, ayúdame con esto.

Andrew- ¡Esta camioneta tiene que funcionar o dejo de llamarme Andrew!

Salen Andrew y Peter.

Abuela- Entonces empezaré a llamarlo Nicolás ji, ji, ji… 




viernes, 3 de octubre de 2014

Los Frijoles Navideños


Una canasta de hermosas y rojas manzanas se muestra apetitosa a los ojos de quienes la contemplan. En el fondo oculto hay una manzana de mal aspecto con manchas color café. Poco a poco va muriendo y su contacto con las otras manzanas podrirá toda la fruta.

Así es la maldad en la vida de los niños y jóvenes. Aunque han sido creados en pureza y bondad, el contacto con las malas compañías y lugares oscuros va destruyendo su inocencia y su vida. El mal no se manifiesta en todo su potencial de manera inmediata, es como una semilla que se siembra, se alimenta y se cuida hasta que sus propias ramas nos enredan y estrangulan.

 La obra Los Frijoles Navideños, muestra un pasaje de la vida de Chayito, la protagonista quien a sus once años ha sido entregada a un hogar sustituto. Aunque está rodeada por una familia que desea ayudarle a superarse, los malos consejos la orillan a cometer pequeñas travesuras que luego se convierten en peligrosas aventuras y nefastos eventos.

 En vísperas de la Nochebuena la familia López se prepara para celebrar la Navidad en un pueblo de la Frontera. Los padres Lupe y Lola, acompañados por su hija Wendy, dan asilo a Martha, una jovencita inmigrante y a Chayito, una niña cuya madre perdió su custodia. La soberbia de Martha y su mal amigo Temi, van corrompiendo los buenos deseos de Chayito hasta que la orillan a cometer un acto de rebeldía que casi termina en tragedia.

Los Frijoles Navideños es una obra para toda la familia que entrelaza la comedia y el drama con un mensaje de valores sociales y familiares. Cualquier público podrá encontrar una reflexión para su vida en una época de año tan emotiva y llena de esperanza.



Personajes

Chayito (Niña abandonada)  10-12 Años
Wendy  (Hija del reverendo Lupe y de Lola) 10-12 Años
Martha (Joven abandonada)  16-18 Años
Miguel  (Nieto de don Tino y doña Tina) 10-12 Años
Reverendo Lupe 40-45 Años
Lola (Esposa del reverendo Lupe) 35-40 Años
Don Tino (50-60 Años)
Doña Tina (50-60 Años)
Temi (18-22 años) joven rebelde.




Fragmento



Chayito: Señora Lola ¿Es verdad que mi madre no va a regresar nunca por mí?

Lola: ¿Por qué lo dices?

Chayito: Todos lo dicen. Mis amigos siempre me dicen eso.

Lola: No importa lo que otros digan, sino lo que tú creas y lo que Dios disponga. Anda, ayúdame a limpiar los frijoles que ya se me ha juntado el trabajo.

Chayito: Está bien, pero primero tendré que barrerlos.

Lola: ¿Qué dices? Pero ¿por qué está todo el fríjol regado por el suelo?

Chayito: Es que como no teníamos fichas, los usamos para la lotería.

Lola: No puede ser. Bueno, pero lo enjuagas bien y luego lo pones en la olla sobre la estufa. Mientras yo busco el recetario de Navidad que me pidió la abuela de Miguel.

Chayito: ¿Señora Lola?

Lola: ¿Si?

Chayito: Creo que necesito un vestido nuevo para Navidad.

Lola: Bueno, tienes varios vestidos, puedes ponerte cualquiera de esos para Navidad.

Chayito: Pero ya todos están viejos.

Lola: No podemos comprarte un vestido nuevo Chayito, no disponemos de fondos para ir al almacén y ya no tengo tiempo de hacerte uno con mi máquina de coser.

Chayito: Pero lo pueden hacer con el dinero del cheque que manda el gobierno, ese dinero es mío.

Lola: Creo… creo que ese tema lo tendrás que discutir con mi esposo.

Chayito: ¿Con el reverendo Lupe? Pero ese dinero es mío. No es justo que se lo queden todo, yo necesito cosas.

Lola: Mira, termina con los frijoles y luego hablamos de eso.

Entra el reverendo Lupe.

Reverendo Lupe: ¡Esposita, ya llegué!

Lola: Hola Lupe, ¿terminaste de preparar todo para el servicio de esta noche en la iglesia?

Reverendo Lupe: Sí, el coro tuvo su último ensayo y ya quedó listo el telón para el drama de Navidad. Espero que no pase lo del año pasado, que en plena función a uno de los ángeles se le ocurrió ir al baño y se tuvo que interrumpir la obra.

Lupe y Lola ríen.

Lola: Lo bueno fue cuando a uno de los pastores le dio sed y sacó su Coca Cola del morral.

Lupe y Lola ríen.

Reverendo Lupe: Lola ¿llegó la correspondencia?

Lola: Sí, está sobre la mesa, hay un paquete dirigido a ti.

Reverendo Lupe: Mira lo que llegó, unas esferas que compré por catálogo para nuestro pino de Navidad.

Lola: ¡Qué bonitas están!, se verán maravillosas en el pino.

Reverendo Lupe: Ya no tendremos que adornar el pino con esferas viejas y descoloridas. Creí que no iban a llegar a tiempo, pero se verán muy bien. ¿Llegó algo más en el correo?

Lola: Sí… el cheque.

Reverendo Lupe: ¡Ah, el cheque, excelente!… saldré ahora mismo a cambiarlo. El banco cierra temprano.

Chayito: ¡Cof, cof, cof! (Tose con fingimiento para llamar la atención).

Lola: ¡Ah sí! Lupe…Chayito tiene algo que discutir contigo.

Reverendo Lupe: Dime Chayito qué necesitas.

Chayito: Es que quiero tener un vestido nuevo para Navidad y yo pensaba que me lo pueden comprar con el dinero del cheque.

Reverendo Lupe: El cheque es para tus alimentos, los vestidos y los zapatos cuando los necesites, pero por ahora no necesitas nada de eso.

Chayito: Es que siempre me compran ropa de segunda y eso no es justo, su hija sí puede estrenar, y Martha y yo debemos llevar siempre los vestidos viejos.

Reverendo Lupe: Lo siento, pero no todo se trata de cosas materiales, debes adaptarte a lo que te podemos dar.

Chayito: Lo que ustedes me dan son tres platos de comida al día y de vez en cuando uno que otro vestido usado, ¿le parece que eso es lo mejor que merezco?

Reverendo Lupe: Tratamos de ser un buen ejemplo para ti.

Chayito: Un buen ejemplo, si quisieran ser un buen ejemplo no se estarían robando mi dinero.

Lola: ¡Chayito!


Un Rey en el Pesebre.

Un Rey en el Pesebre relata la historia del milagro y el escándalo que vivieron dos parejas judías en el inicio de la historia cristiana.
Elisabet, una mujer de edad avanzada, esposa de un sacerdote, vivía la amarga experiencia de la esterilidad, lo cual era vergonzoso por cosiderarse un castigo de Dios. Zacarías, su esposo, recibe la noticia del ángel Gabriel anunciándole que su mujer quedará encinta. Así, esta pareja concibe a Juan el Bautista. Contra toda posibilidad lógica, el par de ancianos vive el milagro de tener hijo en su vejez.
María, una joven virgen, está a punto de unirse en matrimonio a José, ya se han firmado los papeles de compromiso y se ha fijado la fecha de la unión, pero para los judíos el compromiso firmado equivalía al matrimonio y se consideraba que ya estaban desposados. En un sorpresivo momento María recibe la visita del ángel Gabriel anunciándole que concebirá al Mesías.
Después de 400 años de espera por fin llegará el Redentor de Israel. María, una aldeana de un miserable pueblo es la elegida.
La obra aborda el conflicto social, familiar y religioso que se da con estos dos anuncios. Por un lado la rígida ley que imponían los sacerdotes y fariseos humillaba a los judíos. Por el otro, el imperio romano arruinaba al pueblo con la esclavitud, los impuestos y el terror impuesto por el perverso rey Herodes.
Para María y José las cosas no serían fáciles. No se consideraba decente que la pareja tuviera relaciones antes de unirse y ahora María estaba encinta. El peor problema para José era que su prometida quedó embarazada antes de la boda y no precisamente de él, así que no podría unirse a ella aunque la amara, él no se podía contaminar porque era del linaje real de David y si la denunciaba, María sería apedreada. La historia de que el niño era hijo del Espíritu Santo era increíble y ridícula.
Cuando José decide recibir a María después de que el ángel le dice en sueños que no tema, él sabe que ha recibido una gran encomienda y debe proteger a María de la sociedad dispuesta a despedazarla y huir con ella para protejer a Jesús de aquellos que deseaban matarlo desde su infancia.






La Tormenta en el Establo


Y meteré la tercera parte en el fuego, los refinaré como se refina la plata, y los probaré como se prueba el oro. Invocará él mi nombre, y yo le responderé; diré: "El es mi pueblo", y él dirá: "El SEÑOR es mi Dios."
Zacarías 13:9
La fe no se adquiere ni se fomenta por el simple deseo de hacerlo. La fe se nace y se fortalece a traves de las pruebas a las que diariamente nos enfrentamos.
El problema es que nunca sabemos cuáles ni cómo serán las tormentas que nos van a sorprender. Puede ser en un día soleado o en medio de la noche cuando los nubarrones se presenten y destruyan la paz que tanto anhelamos.
La Tormenta en el Establo es una obra que presenta la historia de un grupo de jóvenes que se dirigen a un campamento de Navidad y de pronto sus planes se ven arruinados por la llegada de una tormenta.
Mientras buscan refugio para huir del frío y la nieve, encuentran un establo que les hace recordar la historia de Belén y conviven con la gente que habita en la ranchería.
Pero no todos estarán contentos con la llegada de los visitantes inesperados, pues las ideas que tienen de compartir el mensaje de Navidad son una amenaza para las costumbres del lugar. Por ello es necesario acabar con la vida de los intrusos lo antes posible.
La fe de los jóvenes es puesta a prueba para mostrar sus verdaderos sentimientos y permite al espectador meditar en la llegada del Redentor a su propia vida. La Tormenta en el Establo es una comedia de enredos, intrigas y reflexión muy semejante a la vida real.